El pueblo marinero de Llansá es un importante nudo de comunicaciones de la Costa Brava. La villa de Llançà se distribuye en un núcleo urbano, distante apenas 2 kms. de la costa, y el Port de Llansá, su barrio marítimo.

En la plaza mayor de la población de Llansá encontramos, la bella y hermosa iglesia de Sant Vicenç, con su portalada de estilo barroco. En el Port de Llansá, un espectacular paseo marítimo, nos conduce al islote de El Castellar, pasando por el puerto deportivo. El islote, unido a tierra artificialmente, dispone en su cumbre de un mirador con una zona ajardinada. Además, existe un camino de ronda que bordea toda la bahía de Llansá.

Las abundantes playas y caletas del término de Llansá, ha permitido al turismo un alojamiento abundante de hoteles, apartamentos, restaurantes... permitiendo así una fácil elección.

En la zona de Llansá, predomina cómo es lógico, la cocina marinera, sobretodo en los establecimientos situados en el puerto pesquero. El puerto de Llansá es deportivo y pesquero, se halla protegido de todos los vientos y del mar.

Si usted lo desea, en el mismo puerto, podrá acceder a la subasta de pescado tras la llegada de las barcas al atardecer, siendo este acontecimiento un espectáculo atrayente.